Monica fue encontrada en lo profundo del bosque con las cuatro patas amputadas. Lloraba de dolor, desesperación y no podía ponerse de pie. Si no la hubiéramos encontrado, no habría sobrevivido. La llevamos de inmediato al veterinario. Monica estaba gravemente anémica y pesaba solo 4.6 kg. El médico dijo que su herida era antigua, de hace 2 semanas. Cuánto tuvo que luchar para sobrevivir. Las lágrimas caían de mis ojos por el sufrimiento de este ángel.
Monika fue sometida a cirugía en las cuatro patas. La acaricié dándole toda la fuerza que tenía. Creía que superaría todas estas dificultades. Tan pronto como Monica despertó, la llevé afuera para que tomara aire. Todavía estaba bastante confundida y asustada de todo. Estaba tan feliz de que Monica se estuviera recuperando día a día. Estábamos tratando de enseñarle a moverse con sus patas.
Se volvía más y más segura y ágil. Era fuerte y resistente, eso pensábamos. El médico encontró una solución para ayudar a Monica. Le colocaron 4 patas protésicas. Monica parecía renacer. Todavía estaba confundida al caminar con su pata protésica. Lloraba emocionalmente, no esperaba poder caminar. Esta alegría no se podía expresar con palabras.
Monica se estaba acostumbrando a su nueva vida en su nuevo hogar. Este era el resultado que merecía. Siempre disfruta de la vida a su manera. No más sufrimiento, no más abandono. Gracias por mirar.